Casa  /  Fábrica de Galletas Fontaneda

Fábrica de Galletas Fontaneda

0

El año 1881 es clave en la historia de Aguilar de Campoo. En esa fecha Eugenio Fontaneda, un confitero de origen burgalés, ​comenzó su actividad de fabricación de bizcochos, galletas y chocolates en una casa de los soportales de la Plaza de España.

En un primer momento la actividad fue artesanal, hasta que llegado 1920 adquirió una nave en el lugar donde se asentaría su histórica fábrica. Fue allí, a los pies del castillo de Aguilar, donde se produjo el definitivo despegue de la marca gracias a su proceso mecanización en la elaboración de las galletas. De este modo, la producción en cadena comenzó en 1923, ya bajo la dirección de Rafael Fontaneda, hijo del fundador.

El producto estrella de Fontaneda fue la “galleta María”, lo que llevó a la empresa, ya en la década de 1950, a convertirse en la principal galletera del país. Sus productos eran consumidos habitualmente en los desayunos de los hogares españoles y su eslogan “Qué buenas son, las galletas Fontaneda” se convirtió en un referente de la cultura popular. Para ello fue necesario una continua modernización de la maquinaria, lo que llevó a Rafael Fontaneda en 1952 a realizar un viaje a Estados Unidos para conocer los últimos avances técnicos.

De este modo, la factoría Fontaneda se convirtió en uno de los principales motores económicos y generadores de empleo (con una novedosa e importante inclusión de mano de obra femenina) de toda la comarca. Sin embargo, llegada la década de 1990 los problemas se multiplicaron para la compañía. A la crisis del sector se unió su difícil reconversión desde una empresa familiar a una sociedad anónima, lo que desembocó en 1996 en su venta a la multinacional estadounidense Nabisco.

En el año 2000 la gestión de la marca quedó en manos de United Biscuits quien, en 2002, acometió un plan de reestructuración en el sur de Europa que contemplaba la eliminación de marcas y el cierre de varias factorías, entre las que se encontraba la de Fontaneda.

En abril de ese mismo año se anunció el cierre de la fábrica de Galletas Fontaneda lo que dio como resultado un conjunto de movilizaciones por parte de la plantilla y de los habitantes de Aguilar y su comarca. Pese a ello, la marca Fontaneda salió de Aguilar y el Grupo Siro se hizo con la propiedad de las instalaciones bajo una nueva denominación: “Horno de Galletas de Aguilar”. Finalmente, en 2014 se produjo el derribo de la antigua fábrica de Fontaneda y se trasladó la producción a una nueva factoría localizada en el polígono industrial.

Fábrica de Galletas Fontaneda

En contacto con el establecimiento

Usted no tiene permiso para registrar